Ecuador, agosto 2022, La compañía líder en transformación digital y presente en Ecuador desde 1990, destaca por impulsar el desarrollo del talento, fomentar el equilibrio entre la vida familiar y laboral, potenciar el liderazgo y promover una cultura basada en la actitud positiva de sus colaboradores.
Lo anterior, lo confirman los resultados revelados recientemente por la consultora especializada en data de empleabilidad juvenil, FirstJob, dónde por segundo año consecutivo SONDA es reconocida como una de las mejores empresas para jóvenes profesionales en Ecuador.
“Este reconocimiento nos llena de orgullo y confirma que vamos por el camino correcto, promoviendo una cultura que potencia a los nuevos talentos y los acompaña en su desarrollo de carrera. En SONDA creemos en nuestras personas y siempre buscaremos desarrollar programas o iniciativas que fomenten cada día más el equilibrio entre la vida personal y laboral” destaca Silvia Ramos, Gerente General de SONDA Ecuador.
Cabe destacar que el estudio considera 10 dimensiones, siendo la reputación corporativa de SONDA, la diversidad, la cultura, la innovación y el ambiente laboral las más destacadas. “Seguiremos trabajando para que las nuevas generaciones vean en SONDA un lugar para desarrollarse, ser parte de un ambiente libre de discriminación, con una política de diversidad que elimina las etiquetas y con oportunidades de crecer profesionalmente”, concluye la ejecutiva.
La compañía tecnológica mostró ingresos consolidados por US$ 376 millones en el periodo, con un crecimiento del 5% en moneda comparable, impulsados por cierres comerciales por USD 392 millones en geografías clave y una estrategia de especialización por industria.
La analítica predictiva, impulsada por la IA, está transformando la toma de decisiones estratégicas. Al combinar Big Data y algoritmos avanzados, permite prever escenarios, optimizar procesos y detectar tendencias clave. Sectores como banca, salud, manufactura y logística aprovechan estas herramientas para anticiparse al mercado y mejorar su competitividad.
La IA ha cambiado radicalmente el panorama de la ciberseguridad. Los atacantes ya no necesitan grandes recursos; ahora, pueden lanzar ataques quirúrgicos, masivos y automatizados. Usan técnicas avanzadas de inteligencia artificial para aprender patrones de comportamiento, evadir sistemas de seguridad y realizar ataques ultra personalizados.